24.11.07

Será un minuto de silencio en el cual esta vez, los gritos de la muerte estarán plasmados por los latidos de nuestro corazón, gracias a la memoria que nos ayudó a no perder la insomne persistencia de luchar hoy y la que nos ha llevado a este lugar.
Será un instante en que sentiremos el pesar de haber llegado tarde o de ser impotentes frente a lo que sucedió.
Caminaremos por la pampa, cantando a viva voz "vamos mujer, partamos a la ciudad, todo será distinto no hay que dudar" con nuestro cuerpo lleno de energía, lleno de tristeza, lleno de emoción y lleno de desconsuelo, pero también lleno de esperanza porque esto no vuelva a suceder.